ELLA ESTA TRISTE

Ella esta triste…

Ella esta triste, pero no sera por mucho tiempo. Se sentó acurrucada en la cabecera de la cama. Hundió su frente sobre ambas rodillas frías. No había nadie en casa aquella tarde. Tampoco nadie la llamo al teléfono. Ansiaba que esto no sucediera de manera ambigua y como un deseo cándido de su mundo joven, sueña que alguien  pronuncia su nombre en un eco lejano y casi doliente; confundiendo cada uno de sus pensamientos.
No fue sencillo combatir contra ella misma, hoy no…tal vez aun esta sensible, por lo reciente. Pero cuando vuelva a encontrarse cara a cara con la decisión más valiente y dolorosa que una chica de su edad pudo haber tomado, estará segura.
Ella esta triste y es natural claro, hasta hace unas horas un rostro conocido le hablaba de un amor condicionando a un carácter fuerte y a ella esto la seducía, haciéndola rehén de una fantasía, como la que viven muchas otras chicas.  Pero esto ya fue bastante para su crédulo y frágil corazón. Porque ahora entiende y comprende que hay un amor sin vanidad, amor de Dios, el que no dejó de hablarle en medio del silencio, indeleble huella de una eterna marca que es más fuerte aun… que la misma muerte. Renunciar a muchas cosas hoy representa para ella cerrar los ojos e imaginar, que en este ámbito natural algo se ha muerto y se percibe y asume en un mundo real que parece abstracto a la misma mente.
Mañana será la secuencia nostálgica de imágenes en blanco y negro de aquellos coloridos apasionados besos y de caricias espontaneas que morirán en lo más secreto.
Recuerdos para descartar. Recuerdos para sepultar. Recuerdos que ella sabe, ya no debe recordar. Ella esta triste, pero no será por mucho tiempo…

El yugo desigual duele, si se quita cuando uno vive convencido que es lo que merece.…

Palabras huecas ya no seducen su adolescente corazón, no hay ya miradas posesivas que le dan temor.  Porque ahora ella habla con valor de alguien que la ama sin ninguna condición. Un hombre real, invisible y fuerte. Que murió en la cruz y venció la muerte

Ahora están las cosas como al principio, primer amor con sacrificio, volver a Dios no tiene precio.
El amor es sufrido y se deleita, en la brisa suave y la tormenta fuerte; porque en la vida nada es cuestión de suerte. Dios siempre tiene el control, nada le sorprende.
Mírenla bien ¿sera tan así? o ¿es lo que parece?, ella ya no esta triste…

Autor: David Fernandez
2 corintios 6:14